Es posible desarrollar una arquitectura bioclimática (edificios menos contaminantes y más ahorradores de energía) que permita una nueva forma de construir más eficaz y respetuosa con el medio ambiente.
La implantación de la energía solar es un elemento importante pero no exclusivo a integrar en un edificio bioclimático:
- Emplear energía solar activa – paneles termosolares y fotovoltaicos – en los edificios como elemento básico permite en algunos casos ahorrar mas del 90 % de energía.
- Los diferentes desarrollos bioclimáticos y de energía solar persiguen fines térmicos de refrigeración y calefacción así como de producción de energía fotovoltaica.
La arquitectura bioclimática siempre ha de tener en cuenta el clima de la zona en que va a ser construido el edificio (climatología mediterránea, atlántica, continental… etc) para el desarrollo de sus soluciones y prácticas.
Algunas características o recursos utilizados en las casas bioclimáticas son:
- Sombreamientos, amplios ventanales orientados al sur, tejados simétricos con captadores solares, paneles fotovoltaicos etc…
Un buen diseño en un edificio ahorra entorno a un 50 % de energía, sin incluir los paneles solares.